sábado, 13 de noviembre de 2010

ALICIA EN EL PAÍS DE LAS MARAVILLAS.



Después de tanta publicidad, decidí leer el libro "Aventuras de Alicia en el País de las Maravillas. A través del espejo y qué encontró Alicia allí", del autor Lewis Carroll. De principio me llamó la atención después de haber leído infinidad de reportajes de la película, así que antes de verla decidí leer el líbro, inicia con la biografía del autor que por cierto llamó mucho mi atención por su excentricidad, su gusto por las matemáticas, sus problemas físicos y sus problemas familiares, una vida difícil pero un escritor fantástico.





La lectura esta de locos, me hizo reír, carcajear, pensar, pensar, pensar, pensar, pensar y reflexionar, si aún no lo leen tienen que leerlo, además de ser un clásico está buenísimo. Todo es un mundo loco, muy loco, ¿pero quién no lo es?, eso de caer en un oyo, hacerse pequeña y grande es extraño, pero creo que a veces caemos en oyos, es decir en problemas que nos hacen ver el mundo como un mundo fuera de sí, la gente cambia, no precisamente de tamaño, pero si de actitud y de comportamiento dependiendo donde esté y con quien esté, así como Alicia.

"El charco de lágrimas" es un capítulo que me hizo pensar en cuántas veces me inundé en mis propias lágrimas como Alicia, a veces por cosas importantes y otras por cosas insignificantes.

El Conejo Blanco me recuerda a esa gente que siempre corre, su vida es una carrera y ni se toma el momento para apreciar el presente, la Duquesa un personaje que me hizo sentir temor como esa gente que gritonea, se enoja, regaña sin sentido alguno por cosas realmente absurdas, la Oruga con esa filosofía me hizo pensar en ¿quién soy yo? ¡qué hago aquí?, la Reina para mi resultó el personaje que me hizo temblar, no me gustaría toparme con ella, injusta, impositora, egoísta, abusiva, con un poder que la hacía ser soberbía ¡qué miedo!, espero nunca ser como ella ni tener que tratar con gente así.
Mi capítulo favorito es "Una merienda de locos", ya que aparecen mis personajes favoritos el Sombrerero, la Liebre de Marzo y el Lirón, locos a rematar, me identifico con ellos no sé por qué, pero ¿quién no hace cosas locas?, cargar siempre un antibacterial para cualquier momento limpiarse las manos, es sano, pero loco, llevar consigo a todos lados el celular y contestar enfrente de quien sea y donde sea, es falta de respeto y muy loco, depilarse las cejas, es estético (a veces), pero loco, muy loco, si observamos hacemos cosas locas, que para nosotros son hábitos, manías y para otros locuras, por eso adoro al Sombrerero.

El Lirón un personaje irreverente, un tanto maloso, tramposo, juguetón y astuto, estas cualidades son necesarias muchas veces para que otros no te vean la cara, así que yo creo que hay que ser como él a veces.

La falsa tortuga inevitablemente me lleva a pensar en esa gente que aparenta ser algo que no es, en aquellos que se vanaglorian, en los presumidos y pedantes, que finalmente no son lo que dicen o aparentan ser.

El espejo, el mundo detrás de él, las flores vivientes, los insectos, Tweedledum y Tweedledee, la Reina Blanca, Humpty Dumpty, el León, el Unicornio y el Caballero son personajes de lo más extraños, ya de inicio que detrás de un espejo exista otro mundo, ya esta grave, sin embargo creo que refleja los anhelos, otro mundo donde ahora Alicia encuentra personajes buenos, ayuda, amigos, extraños pero que le acompañan en su aventura hasta el final, me hace pensar en el mundo que me gustaría, en la familia y amigos que me han apoyado a lo largo de mi vida y en los momentos difíciles, en los valores, en los ideales, en las cualidades de los seres humanos, en saber que quizá también nuestro mundo puede tener un buen final.

Y como olvidar a Dinah, una mascota fiel, que escucha las locuras de Alicia y seguramente todos los que tenemos mascotas alguna vez como locos hemos hablado con ellas, les hemos preguntado cosas, nos hemos consolado con ellas, ahora que lo pienso ¡qué loco!

Sin duda alguna es un excelente libro, que yo creo tiene mucho de realidad escondida en la ficción, que los inteligentes podemos ver y comparar, encontrar en ese País de las Maravillas a nuestro propio mundo y hasta nuestro propio actuar.

Ah, sí ví la película y me encantó, Tim Burton un gran director, me fascinó Deep en el personaje del Sombrerero, a mi me pareció que lo fundamental de la historia si está en la película y en esta ocasión declaro un empate entre libro y película.

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