miércoles, 11 de marzo de 2009
LOS CAÑONES DE DURANGO, Autor: Miguel Madrid
La historia se desarrolla en el norte de la República Mexicana en el pequeño pueblo llamado Presidio de unas cuantas casas, en la frontera con Texas. Salvador un jóven de uno s18 años de edad se había quedado huérfano pues su madre había muerto y a su padre solo lo conocía a través de una fotografía que su mamá le dió antes de morir, él de origen español se embarcó hacia América en busca de su padre en el lugar mencionado le habían dicho que encontraría a su padre, pero no fue así, pues Colmer su padre se había enrolado en las filas de Ejército de Francisco Villa, como es sabido dicho ejército viaja constantemente combatiendo y tomando los principales poblados para mantener el dominio en el norte, en este lugar conoció a 3 hermosas mujeres hermanas hijas de un militar de origen norteamericano retirado, ayudaban a su padre a limpiar y empacar fusiles para vendérselos a los rebeldes mexicanos eran armas en mal estado que colocaban hasta abajo de las cajas las menos destruidas en medio y las mejores encima. Paso varios momentos difíciles en el camino por la búsqueda de su padre estuvo a punto de morir a manos de los indios, a manos del ejercito federal, hubo un momento en que una mujer con dos niños se le acercó y le dijo que lo había visto solo y que un hombre no podía estar sin una mujer y que ella había perdido a su esposo pues lo habían matado en una batalla él la rechazó diciendo que no necesitaba a una mujer, para alejarla de dio una moneda de oro, ella la tomó y se alejó al poco tiempo regreso trayendo comida y ropa para Salvador él se asombró y sin que así lo deseara se vió de pronto como dueño de esa mujer este es solo uno de los múltiples momentos que vivió antes de encontrar a su padre que era lo que más deseaba.Cuando preguntaba por su padre obtenía información que lo guiaba hacia él, le decían que era el mejor artillero que tenía el ejército de Villa y que manejaba al Niño, así llamaban al cañón mas poderoso de la Revolución Mexicana pues tenia un alcance de cientos de metros, con él destruían las mejores armas del enemigo.Salvador no dudó en infiltrarse a las filas del enemigo y poner en alerta a Francisco Villa de los planes y las armas que poseía, con el fin de proteger a su padre, aunque no lo conocía, buscaba que no corriera peligro. Cuando por fin logró ingresar a las filas de Villa se percató de las verdaderas intensiones de Villa y su más cercano colaborador pues éste era un exhibicionista dado que mandó a traer de los Estados Unidos a los mejores cameromans para que filmaran las batallas de los Dorados haciendo alarde de su liderazgo y su intolerancia.Los cameromans comentaban que Villa no jugaba derecho, pues solo enviaba al matadero a su improvisada pero numerosa tropa que más que bien armada y organizada era la valentía y el número lo que los sacaba adelante, además lo consideraban como un ratero y violador pues la prueba estaba en que había decomisado en varias ocasiones grandes haciendas y millones de cabezas de ganado enviándolas a Estados Unidos en donde se encontraba su hermano para que las vendiera y de esta forma sacaban provecho él y sus más cercanos colaboradores.Estaban en plena batalla cuando Salvador después de haber hablado con Villa y este le dijo dónde se encontraba su padre, por fin llegó a su lado y éste se acercó diciendo: soy Salvador tu hijo, Colmer no mostró ninguna emoción esto desmoralizó a Salvador pues esperaba otra cosa, cruzo algunas palabras con poco entusiasmo por parte de Colmer, que decía que poseía el mejor cañón y que jamás lo podrían derrotar, Salvador le había informado a Villa y en su momento a su padre que el enemigo había adquirido un cañón aún más poderos que el Niño, en ese momento cayó cerca de ellos un cañonazo pero no paso nada, Colmer con maldiciones respondió el ataque, de pronto ambos solo alcanzaron a ver una gran luz, el humo ensombreció el ambiente, las voces de su padre y Salvador acallaron cuando el humo de desvaneció, Salvador vio en pie al cuerpo de su padre lleno de sangre pero la cabeza había volado en pedazos.Jamás pudo escuchar las palabras que hubiera deseado su padre.Es un libro que nos permite conocer la otra cara de la moneda de la División del Norte, acrecentando el conocimiento de la historia, permite formar un criterio propio, es ameno y recomendable para que los alumnos adquieran el gusto por la historia de México y conozcan verdades ocultas en libros de texto.
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